Crecimos con una fe “Negativa”

Por Atenea Del Mar

No hagas esto o aquello; no digas esto aquello; no visites ese lugar ni pienses en eso. En otras palabras, no queremos crear pecado.

Pero si nuestro enfoque está en sistemáticamente no hacer algo, al final de nuestra vida lo único que hemos hecho es… nada.

Habremos sido como personas muertas con nada que mostrar en nuestro tiempo en la tierra

Un cadáver no “peca”. Pero ¿un cadáver muestra la gloria de Dios? Jesús define el ser fructífero como parte necesaria de tener Fe: Entonces Jesús les contó esta parábola

6Dijo también esta parábola: Tenía un hombre una higuera plantada en su viña, y vino a buscar fruto en ella, y no lo halló. 7Y dijo al viñador: He aquí, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala; ¿para qué inutiliza también la tierra? 8Él entonces, respondiendo, le dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella, y la abone. 9Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después.

LUCAS 13 6:9

Si la vida se trata de conseguir una misión muy particular y personal, entonces “la obediencia” y “ hacer lo correcto” seria no alejarte de Dios para no pecar y debe de lograr alcanzar esa tarea en concreto: buscar primero el reino de Dios, llevar fruto en su nombre y, en la palabra “hacer buenas obras”

El llamado a buscar primero el reino de Dios es el fundamento para cómo podemos responder y proteger nuestra misión de ataques de personas o circunstancias.

Te lo ejemplifico, si trabajaras en una compañía y te mandarán a llenar el tanque de gasolina del automóvil de la empresa y regresaras a la oficina diciendo:

—tuve una gran conversación con el señor que me atendió, recogí algo de basura que había dentro del carro. E incluso traje donas para toda la oficina.

Pero no llenó el depósito de gasolina, ¿realmente ha sido obediente? Puede que haya hecho algunas cosas buenas y nobles, pero esas otras cosas le impidieron hacer lo primero.

Peor aún , si dijeras además:

— Y tú deberías estar orgulloso de mi porque no le robé a nadie, ni atropellé a nadie, ni critiqué a nadie, ni le mentí a nadie.

Muy bien, pero ¿llenaste el tanque de gasolina? Fuiste enviado a eso.

El llamado a buscar primero el reino de Dios es el fundamento para cómo podemos responder bíblicamente a las personas y circunstancias adversas.

Y en definitiva no sólo se trata de proteger y cuidar tu gozo, nuestra paz, nuestra reputación y cordura aunque estas cosas son buenas. Se trata principalmente de proteger nuestra misión.

Somos salvos para ser fructíferos. Hemos sido reclutados para una gran obra grande y santa.

No hay tiempo que perder con personas inteligentes que drenan toda nuestra energía y esfuerzo. Tu trabajo en el reino es lo importante.