¿Sería yo una buena pareja?

Por Nicole Di Matteo

CONTENIDO PSICOLÓGICO

Atraemos lo que somos, recibimos en función de lo que damos honestamente. Hago énfasis en la palabra “honestidad”, porque no se trata tan solo de lo que doy, sino de lo que doy honestamente.

Poseemos en función de lo que creemos merecer. Entonces, ¿Qué estoy buscando ahora?, ¿busco a alguien que me haga feliz o a alguien a quien hacer feliz?, ¿alguien que me de amor o alguien en quien depositar lo mío?

Ser yo una buena pareja se resume en una frase: soy buena pareja cuando estoy buscando a alguien para darle de mi felicidad y compartir mi crecimiento con ella ( o con él)

Cuando te vayas de este mundo, esa persona que fue tu pareja no va a recordar lo que compraron juntos ni la cantidad de tiempo que le diste, va a recordar cómo la hiciste sentir durante la relación.

La vida está hecha para que seamos felices la mayor cantidad de tiempo posible, reír, disfrutar, bailar, hacer el amor y triunfar.

Si embargo, todo esto tiene un precio que debes estar dispuesto a pagar, el precio de conocerte, de quererte, de tener una lista clara de lo que es no es negociable para ti, y mantenerte fuerte en no aceptar lo contrario por ninguna circunstancia; el precio de pasar algo de tiempo en soledad mientras cambias tus formas irracionales de amar, y parece ese alguien que sí quiere estar contigo y sea un complemento de tu vida

Photo by RODNAE Productions

La felicidad se mantiene más tiempo cerca de ti cuando seas capaz de decir con seguridad y convicción “te amo”, pero no te necesito”, cuando dejes de entrar en relaciones en las que el control, la manipulación, y el miedo sean los protagonistas.

La felicidad se quedará a tu lado el día que internalices que “amar” es delicioso, mientras que “tener que amar” es terrible.

Vamos a recuperar el presente, dejemos de pensar en el futuro, en que la relación de pareja tiene que durar, en qué tiene que ser buena. Vamos a dejar de pensar en el pasado, en las veces que las parejas que tuviste te hirieron

Vamos a concentrarnos en este momento, que es el único que tenemos. Nuestra vida útil y disfrutarle es corta: no venimos más allá de los ochenta o noventa años.

¿Y cuándo es que empezamos a disfrutar? ¿Cuándo empezamos a aprender? ¿Cuándo empezamos amar?

Puede ser que cualquier día, la diferencia la hace tener conciencia de que el tiempo es limitado.

Nuestro único recurso no renovable es el tiempo: entonces sal y busca a una persona que se parezca a ti en lo esencial, que comparta tus creencias, que se divierta con lo que te gusta, que ame tus chistes y te acompañe en tus tristezas.


Desde hoy, apenas sueltes este artículo, tendrás dentro de ti las herramientas para estar en revisión constante y ser una buena pareja.

La alegría no está en alcanzar el yo ideal, si no en el proceso mismo de viajar hacia él sin despreciarse a sí mismo y sin ansiedad

Walter Riso

Photo by Ketut Subiyanto

Si tienes pareja y te ves reflejada con las respuestas positivas a los puntos que vas a leer a continuación, date las gracias, dáselas a tu pareja y disfruta.

NOTICAS DEL REINO

PERIÓDICO DIGITAL

Te invita a ver el siguiente video corto para reflexionar

Nicole Di Matteo

Cierra los ojos y checa cómo te conectas con el amor saludable. Pregúntate si la persona que es tu pareja:

¿Está contigo en la buenas y en las malas?

¿Está disuesta a negociar las diferencias?

¿Te acepta como eres?

¿no te necesita, pero aún así se queda a tu lado?

¿Se siente feliz consigo misma y contigo?

¿Te da y lo dsifruta?

¿ Te mima, te cuida y te da placer en la cama?

Si no encuentras respuestas positivas a las interrogantes, revisate para cambiar la situacion. Deja de acumular dudas, acumula momentos. Busca una pareja de tu talla.

Deja un comentario