‼️ Te amo ‼️

Por Eduard Cohen

Te pregunto ¿De que manera me amas? Eeeeee ¿Sabes cómo amar?

Resulta que el amor que construye, desarrolla y nutre, es una capacidad que se desarrolla hasta el infinito.

Y esa conducta se va especializando en la medida que la vamos trabajando. Por ejemplo, un arquitecto diseña su primera casa y con más experiencia cuando diseña su casa número cincuenta la va a diseñar hermosa, funcional, con todos los detalles en pisos, carpinterías e iluminación perfectamente bien pensados.

Cuando más amamos, más capacidad de amar tenemos. Tanto como tú decidas. Se puede elegir amar a una persona que sea armónica, con la definición personal de la calidad de vida que yo elijo vivir.

Te explico si tienes cierta calidad de vida que yo elijo vivir. Es importante no elegir a una persona que disminuye mi calidad de vida, porque vamos a estar desamando.

Nunca tiene que ver con elegir una persona que satisfaga las necesidades individuales. El amor es la forma más completa y compleja de vinculación que se puede alcanzar como ser humano.

Va a requerir de nosotros que no quieras cambiar o enseñar a la persona amada cómo deberían de ser, tienes que asumir tu vida a tu manera, hay que otorgarles que esa persona la haga a la suya, no a la tuya.

Cuando logras separar las dos cosas, respetar la vida de tu amado como sea y la tuya a tu manera, en ese momento estarías preparado para construir la relación de pareja, con el símbolo del amor verdadero.

Estas dos personas necesitan tener independencia; económica, emocional, sexual, social.

Saber vivirse desde esta autonomía, absolutamente responsables desde sus necesidades individuales, cuando se juntan tendrás muchísimo que ofrecer. Puede dar todo lo que tiene, porque nadie puede dar lo que no tiene; primero hay que tenerlo para poder compartirlo.

Un amor de verdad tiene que eliminar el “necesitar de la pareja”. Estar con mi pareja, es porque me nutre, porque lo gozo, porque soy una mejor persona que he sido hasta ahora, gracias porque he compartido con la otra persona, igualmente responsable de sí mismo.

Tener conciencia de la propia identidad y de la diferencia con el otro, es disfrutar de las diferencias del otro, porque me puedo nutrir de esas diferencias, siempre disfrutando de lo que hay, dejando de poner la mirada en lo que falta.

Cuando miramos lo que falta, entonces nos centramos en las necesidades, y cuando siembro en las necesidades lo que cosecho, son limosnas; porque si estoy necesitado, entonces cualquier cosa me va a venir un poquito bien, y una vida hecha de limosnas es una vida miserable, que sólo sirve para sufrir.

Cuando decidimos vivir lo bueno, lo bello, lo verdadero, a través de mi relación con otro, entonces estoy nutriéndome y nutriendo el vínculo con el otro, estoy mostrándome para que me elijan cada día, un lindo detalle amoroso es elegir al otro todos los días.

Lo cierto del ser humano es nacer y morir, entonces todo lo demás que vivimos es incertidumbre, gracias a que también somos inciertos, y el que ama es el ser humano, el amor es incierto, riesgoso y por eso es que me voy a tomar el enfoque, el trabajo de cuidarlo.

Cuando decides, eliges ese amor verdadero, tienes que estar consciente de tu proceso, y el proceso que tiene cada uno. Nunca dejar de ser uno mismo, hacer el compromiso de elegirlo cada día.

Podemos decir que el amor verdadero es nutritivo, expansivo, nos lleva a un estado de armonía, congruencia y bienestar inimaginable. Les aseguro que sí se puede y es hermoso.