¿Cómo me comunico con Dios?

Por Atenea del Mar

Al leer la Biblia, descubrimos que los hombres que desearon a Dios fueron hombres de oración.

Algunos ejemplos nos dan una idea de hombres a quien Dios uso:

—Abraham, a través de su vida, levantó altares e invocó el nombre del Señor.

7Y apareció Jehová a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta tierra. Y edificó allí un altar a Jehová, quien le había aparecido. 8Luego se pasó de allí a un monte al oriente de Bet-el, y plantó su tienda, teniendo a Bet-el al occidente y Hai al oriente; y edificó allí altar a Jehová, e invocó el nombre de Jehová.

Genesis 12:7-8

—Moises se inclinó sobre sus rodillas orando para que Dios lo ayudara mientras dirigía a la nación de Israel.

12Guárdate de hacer alianza con los moradores de la tierra donde has de entrar, para que no sean tropezadero en medio de ti. 13Derribaréis sus altares, y quebraréis sus estatuas, y cortaréis sus imágenes de Asera. 14Porque no te has de inclinar a ningún otro dios, pues Jehová, cuyo nombre es Celoso, Dios celoso es. 15Por tanto, no harás alianza con los moradores de aquella tierra; porque fornicarán en pos de sus dioses, y ofrecerán sacrificios a sus dioses, y te invitarán, y comerás de sus sacrificios; 16o tomando de sus hijas para tus hijos, y fornicando sus hijas en pos de sus dioses, harán fornicar también a tus hijos en pos de los dioses de ellas.

Éxodo. 34:12-16

—David oró pidiendo perdón por su orgullosa decisión de contar al pueblo bajo su mando

10Después que David hubo censado al pueblo, le pesó en su corazón; y dijo David a Jehová: Yo he pecado gravemente por haber hecho esto; mas ahora, oh Jehová, te ruego que quites el pecado de tu siervo, porque yo he hecho muy neciamente.

2 Samuel 24:10

—Salomón, el gran rey de Israel, oro pidiendo sabiduría para juzgar a la nación con rectitud 1R 3:9

9Da, pues, a tu siervo corazón entendido para juzgar a tu pueblo, y para discernir entre lo bueno y lo malo; porque ¿quién podrá gobernar este tu pueblo tan grande?

1 Reyes 3:9

—Daniel hizo una oración de confesión por él y por su pueblo, pidiendo a Dios que los judíos volvieran a su tierra

3Y volví mi rostro a Dios el Señor, buscándole en oración y ruego, en ayuno, cilicio y ceniza. 4Y oré a Jehová mi Dios e hice confesión diciendo: Ahora, Señor, Dios grande, digno de ser temido, que guardas el pacto y la misericordia con los que te aman y guardan tus mandamientos; 5hemos pecado, hemos cometido iniquidad, hemos hecho impíamente, y hemos sido rebeldes, y nos hemos apartado de tus mandamientos y de tus ordenanzas. 6No hemos obedecido a tus siervos los profetas, que en tu nombre hablaron a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres y a todo el pueblo de la tierra. 

Daniel 9: 3-6

—Nehemías oró pidiendo a Dios protección durante la reconstrucción de los muros de Jerusalén.

9Entonces oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos pusimos guarda contra ellos de día y de noche.

Nehemías 4:9

—Los apóstoles oraron pidiendo orientación después de la ascensión de Jesús Hc 1:14

 14Todos estos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.

Hechos 1:14

—El apóstol pablo oró con perseverancia por las iglesias donde había ministrado 2 Corintios 11:28. También oró sin descanso por los hombres que había discipulado

3Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día; 4deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de gozo; 5trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.

2 Timoteo 1:2-3

Cuando Pablo escribió a Timoteo sobre cómo la Iglesia de Éfeso debería realizar su adoración, le dijo: “Exhorto ante todo, que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracia…» (1Timoteo 2:1)

Un poco después, hizo esta exhortación: ”Quiero pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas” (v. 8)

Pablo vio la oración como un ministerio primario de un creyente y quiso que fueran activos en esta importante función de adoración.

Quizá usted esté ya disfrutando de una vida de oración significativa. Pero si es como la mayoría de nosotros, es probable que haya posibilidades para mejorar; o a lo mejor, muchas posibilidades.

Para mí, el problema más grande es que es fácil dejar que otras ocupaciones llene la mayoría de mis oportunidades para orar.

Dominar el arte de la oración, como cualquier otro arte, requiere de tiempo, y la cantidad de tiempo que dediquemos a eso será la real medida de nuestra concepción de su importancia.

J. Oswald Sanders

Entonces nos debemos preguntar ¿qué necesitamos usted y yo para perfeccionarnos y desarrollar un corazón en la oración.

Tiempo

Es apenas obvio que el tiempo es un elemento clave para desarrollar una vida de oración vigorosa. Señalar un tiempo durante el día, para mí, el mejor disposición es temprano en la mañana. A esa hora me encuentro en mejor disposición para orar.

En muchas ocasiones hago oración mientras salgo a correr. Tomó mi lista de oración en una mano… y empiezo a correr. Apenas empiezo a golpear el pavimento con los pies y a orar, siento como si me sumergiera en la oración y, cómo un beneficio adicional, me olvido del esfuerzo que debo hacer para trotar

Es posible que para usted haya otra hora en el día más apropiado para orar. Pero como antes lo dijo J.Oswald Sanders, la cantidad de tiempo que damos a algo indica lo importante que eso representa para nosotros.