¿ Am❤ a mí esposo ?

Por Roberta Sánchez Smith

Quizás haya oído la historia de un hombre y de una mujer que empezaba a experimentar problemas conyugales después de 15 años de casados por lo que fueron a un consejero.

En medio de la sesión, la esposa se quejó, diciendo: “ El ya no me dice más que me ama”. El hombre la miró sorprendido y respondió: “Bueno, le dije que la amaba cuando nos casamos, y todavía lo mantengo”. Era un largo tiempo sin que él le expresara a ella su amor.

Para refrescar un poco la memoria, vamos a ver el libro de Efesios.

Una mirada al supremo ejemplo de amor.

Cristo sirvió a otros incluso hasta la prueba de muerte. Y Jesús es también nuestro ejemplo supremo cuando se trata de amor. Efesios 5:22-23 Pablo señala cinco formas en que Jesús demuestra su amor a todos los creyentes.

En cómo Jesús nos ama así es como debemos de amar a nuestro cónyuge (esposa o esposo)

Leemos Efesios 5:22-23 y luego  veremos lo que podemos aprender del ejemplo de Jesús.

El distintivo amor de Cristo.

1.- El amor de Cristo es un amor sacrificial “Cristo amo a su iglesia y se entregó así mismo por ella” (v. 25). En (Hechos 20:28), donde nos recuerda que Cristo y el sacrificio que hizo por cada uno de nosotros, siendo este ejemplo perfecto de las demandas de amor.

2.- El amor de Cristo es un amor purificador. En cuanto a cada creyente es “santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentarla a sí mismo, a fin de ser glorioso, que no tuviera mancha ni arruga.» (vv. 26-27)

El amor de Jesús es el ejemplo Perfecto de lo que hace el amor.

3.- El amor de Cristo es un amor que alimenta. “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, así mismo se ama. Por qué nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la Iglesia». (vv. 28-29). Así como un hombre se preocupa por el bienestar de su propio cuerpo, Jesús está preocupado por el bienestar de su propio cuerpo, la Iglesia,. Él cuida con ternura cómo algo frágil, precioso y muy especial.

El amor de Jesús es el ejemplo perfecto de lo que el amor produce.

4.- El amor de Cristo es un amor perdurable. En palabras familiares usadas con frecuencia en las ceremonias nupciales, Pablo cita el Antiguo Testamento: “ por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una misma carne” (v. 31).

Al comentar esta enseñanza, Pablo explica: ”Grande es este ministerio; más yo digo esto respecto de Cristo y de la Iglesia”(v.32). Pablo nos está diciendo que la unión con nuestra esposa debe ser tan perdurable como la unión de Cristo con su Iglesia.

El suyo es un amor eterno… no obstante cómo actuemos nosotros. El amor de Jesús es perdurable e incondicional.

El amor de Jesús es el ejemplo perfecto de dedicación al amor.

5.- El amor de Cristo es un amor activo. Esta afirmación resume todo lo que hemos aprendido sobre el amor bíblico, como ejemplifica Jesús. Quizás nos sirva como una declaración resumida.

El amor de Jesús es el ejemplo perfecto de amor demostrado.

El verdadero amor bíblico es sacrificial, purificador, nutriente, y perdurable. ¡Esto mismo, amigo mío, debe ser el amor por su esposa!

Su amor como esposo tiene que ir mucho más allá y ser más profundo que las meras palabras y expresiones verbales.

La palabra traducida “amor” en Efesios capítulo 5 tiene pocas, si es que tiene algunas, señales de haberse usado en los antiguos escritos aparte de la Biblia. Es una palabra nacida dentro de la mente y costaron de Dios verdadero y amoroso que demostró su amor por nosotros no diciendo que nos amaba, sino muriendo por nosotros. ¡Esto es amor en acción! (Y por tal razón tú y yo) deberíamos caer sobre nuestras rodillas en señal de gratitud por la profundidad del amor de Dios hacia nosotros.

Juan, el discípulo de Jesús, a veces llamado “discípulo amado”, nos instruye para que mostremos nuestro amor mediante acciones.  Escribe “No amemos de palabra no de lengua, sino de hecho y en verdad” (1 Juan 3:18).