La Quinta es la Vencida

Mis Neteadores, ¿cómo están?

En este espacio, he hablado de las relaciones de pareja hasta el cansancio, he compartido con ustedes muchas anécdotas, vivencias, que, en ocasiones, me gustaría que fueran sólo eso, historias que parecen cuentos, pero, si quieren no son cuentos; y he estirado tanto el tema, que siento, que es hora de cambiar de tópico.

Gracias a cada uno de ustedes por escribirme a mi correo miguel.perez@grupopozzeidon.com.mx

Es muy gratificante, saber que es de su agrado total esta sección hecha con amor, pensando en ustedes, y con una reflexión que puedan aplicar en su vida cotidiana.

El tópico de esta semana es…

¿Será bueno que cambie de tema? ¿Será una buena idea que cambiemos el rumbo de esta columna por otro más “campechano? ¿De qué hablaremos ahora? ¿El amor, es un buen tema? Nos hace sentir vivos, nos hace experimentar cosas bonitas, hasta maripositas, pero, ¿Qué tan bueno es seguir con esto?

En definitiva, creo que es hora de crecer, de evolucionar y cambiar; buscar independencia del amor, liberarnos de esas cadenas, que, son dulces, pero, a la vez, pesadas; de dejar a un lado la obsesión y concentrarnos en nosotros mismos.

 Sesiones tras sesiones en el psicólogo, han rendido frutos, como para enfocarnos en otros temas, como la familia, el trabajo, el amor propio, la forma de generar nuevos proyectos…

Pero, el amor, nos dio mucho, nos dio esta rica conexión que tenemos; ustedes lectores, yo escritor, a pesar de que había semanas de sequía textual, de que no llegaban ideas a mí, creo que es y fue bonito eso… Creo que ya me decidí.

¡Sigamos hablando del amor!

¡Exacto! ¡Así sonamos cuando decidimos regresar con alguien! Pero,

¿Qué tan malo puede ser regresar con alguien?

Creo que el regresar con alguien, no es malo; siempre y cuando se tenga la película clara; mientras sepamos que no existirá nada diferente, y que regresamos a un lugar donde podemos sentirnos cómodos, pero, hay cosas que no nos gustan y es donde brinca la pregunta:

¿En realidad quiero esto? ¿En esta quinta ocasión, que habrá de diferente?

No se puede tapar el sol con un dedo, y, por ende, sabemos a lo que nos enfrentamos. Queda aquí resaltar que, si regresamos por amor, estemos seguros que es nuestra decisión, y que, a pesar que el entorno no lo apruebe, quien lo va a gozar o sufrir somos nosotros, no los demás.

Es como apostar en el póker. A lo mejor, esta es la mano buena y podamos ganar la apuesta total. Como también, existe la posibilidad de salir en banca rota y perder lo poco que teníamos, ¿en realidad eso queremos? ¿Jugar y apostar?

Muchas gracias por leer “Mi Neta”. Te espero la próxima semana para “Netear” más.

Puedes encontrarme en todas las redes sociales, como @mikeperezochoa

Estoy cocinando nuevos proyectos, los cuales, compartiré con cada uno de ustedes.

Y, la Neta, nos leemos a la próxima.

Interrogador: Maestro, ¿si tuviera que mencionar un sólo problema como la causa de nuestra infelicidad y sufrimiento, que nos respondería?

Eckhart Tolle: El problema fundamental lo constituye nuestra identificación con la mente que nos mantiene en el tiempo: pasado o futuro, y de esa manera nos impide vivir en el instante presente que es dónde está la Vida, el único escenario en dónde se encuentran la Paz y la Felicidad verdaderas.

Interrogador: ¿Y como salir de esa identificación con la mente?

Eckhart Tolle: Estar Identificado con la mente significa que usted cree ser sus pensamientos y emociones, es decir usted considera al que piensa y siente, como tu identidad verdadera. Ese es el error. Salir de esa referencia falsa implica volverse consciente de sus pensamientos y emociones. Eso es lo que llamo: “observar al que piensa”, que es otra forma de decir: escuche la voz de su cabeza, esté allí como si fuese un testigo.

Cuando usted escuche esta voz hágalo imparcialmente. Es decir, no juzgue. No juzgue o condene lo que oye, porque hacerlo significaría que la misma voz ha vuelto a entrar por la puerta trasera.

Pronto empezará a darse cuenta de esto: está la voz y estoy yo escuchándola, observándola. Esta comprensión del Yo soy, esta sensación de su propia presencia, no es un pensamiento. Surge de más allá de la mente.

Cuando cesa el forcejeo por huir del Ahora, para aferrarse al tiempo pasado o futuro, la alegría de Ser fluye en todo lo que usted hace. En el momento en que su atención se vuelve al Ahora, usted siente una presencia, una quietud, una paz.

Deja de depender del futuro para la realización y la satisfacción, y renuncia a mirar hacia él para la salvación. Significa por lo tanto, no esta apegado a los resultados. Ni el fracaso ni el éxito tienen el poder de cambiar su estado interior de Ser. Usted ha encontrado la vida que hay oculta en su situación vital. 💕 Gracias

—Eckhart Tolle

¡ Hola Bienvenido !

Miguel Pérez Ochoa

Te invito a leer mi editorial el compendio de todos mis artículos publicados.

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