CONTENIDO NARRACIÓN

Por Ricardo Kerber P.

Vas camino a ser un ruco (como dicen por ahí).

Después, de más de 40 años trabajando, rompiéndote la cabeza para salir adelante; compitiendo contra tus colegas, creciendo y posicionándote por un reconocimiento, desarrollando tanta experiencia, demostrando que eres de lo mejor.

¿Estás ahora, esperando llegue el momento para retirarte?

¡Qué desperdicio, todo aquello, que estás dejando sobre la mesa, cuando, puedes ayudar a tantas personas, nuevos empresarios y empresas, a crecer!

Y, por si fuera poco, has desarrollado a tope, tus capacidades.

Además, el promedio de años de vida, sigue aumentando, por lo cual, si decides dedicarte a no hacer nada, puede ser que desperdicies una de las etapas más productivas, que aún tienes.

En serio, ¿a qué te quieres dedicar ahora?

Interesante, la pregunta, ¿no?

¡Imagina, que ahora, puedes dedicarte a lo que quieras, no, a lo que te encomendaron o te tocaba hacer en la empresa!

La oportunidad, es ideal para dar el paso hacia el siguiente episodio de tu vida. Puedes, incluso, reinventarte, complementar tu formación y desarrollar tu propio negocio.

Y, llegó el momento de una decisión importantísima.

¿Qué vas a hacer ahora?

Hay muchas cosas, que puedes llegar a hacer, pero, si vienes de una empresa o corporativo, te gusta, y sabes solucionar problemas, entonces, tienes una oportunidad grandísima frente a ti.

La consultoría, coaching, mentoría o prácticas similares, pueden ser tu opción.

Pero, debes de hacerlo bien, con ganas, como todo un profesional. No hacer las cosas sólo como un hobby, sino, como un reto que te haga crecer a ti y a tus clientes.

Opino, que tienes dos caminos:

Entrar a las filas de los retirados, que se tiran en la hamaca, engordan, buscan a sus cuates para perder el tiempo, porque, “se lo han ganado”, y después, se desesperan, porque no saben que más hacer.

Ponerte las pilas y desarrollar un negocio, que te permita explotar toda la experiencia, que adquiriste a lo largo de los años; mantenerte activo y creativo mentalmente, seguir conociendo, gente interesante; dejar un legado, y, por supuesto, aumentando exponencialmente tus ingresos.

Si te gusta la idea, de establecer una práctica de consultoría, coaching o mentoría, de manera profesional, escríbeme.

Todo lo anterior, lo platico contigo, porque, en lo personal, ser consultor de empresas, así como, coach y mentor de empresarios, es algo, que he disfrutado y aprovechado enormemente.