Por Miguel Eduardo Grimalt

[3] Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.
Judas 1:3
Nuestro Señor Jesucristo nos ha llamado a buscar la paz con todas las personas.
Pero en este verso de la Escritura encontramos cómo nuestro Dios nos exhorta a contender por la defensa de nuestra fe en Cristo Jesús.
El celo que todo cristiano siente por nuestro Dios nos mueve a mantenernos firmes en nuestras convicciones, para así defender, con armas espirituales, la fe en la cual hemos creído.
1.-) LA FE EN CRISTO QUE HEMOS OBTENIDO POR ESCUCHAR LA PALABRA DE DIOS;
[24] Algunos días después, viniendo Félix con Drusila su mujer, que era judía, llamó a Pablo, y le oyó acerca de la fe en Jesucristo.
Hechos 24:24
Un día escuchamos acerca de tener fe en Jesucristo y de cómo el Hijo de Dios había venido a este mundo a morir en una cruz por nosotros para perdonar nuestros pecados.
Posiblemente esta historia la habíamos escuchado en muchas ocasiones, pero no teníamos idea, ni la certeza de que existía la posibilidad que fuese una realidad para nosotros tener el perdón de nuestros pecados a través de los méritos de nuestro Señor Jesucristo, para así alcanzar nuestra anhelada salvación.
a.-) EN JESUCRISTO TENEMOS SALVACIÓN;
[22] La justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en Él. Porque no hay diferencia.
Romanos 3:22
La fe que obtuvimos después de escuchar el mensaje de salvación fue en Jesucristo. Él dice en Su Palabra que es el autor y consumador de nuestra fe y a través de Él, podemos obtener salvación y el perdón de nuestros pecados.
Ninguno de nosotros ha podido encontrar en ningún otro ser una salvación tan grande aparte de Jesucristo, en quién podemos ser salvos. Por eso la frase; “SÓLO CRISTO SALVA,” se hace vida en nosotros cuando aceptamos a Cristo en nuestros corazones.
b.-) SIN HABERLE VISTO FÍSICAMENTE HEMOS CREÍDO EN ÉL.
[8] A quién amáis sin haberle visto, en quién creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorioso;
1 Pedro 1:8
¡¡¡LA FE, LA HEMOS OBTENIDO, AÚN SIN VER A NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO!!!
Ciertamente creemos en un Dios vivo, y aunque nuestro Señor Jesucristo murió en una cruz, creemos en todas las evidencias irrefutables que demuestran que al tercer día resucitó.
Tal vez no le hemos visto cara a cara, pero de igual manera creemos en Él, y le conocemos a través de Su Espíritu Santo, quién nos da testimonio de Su gran amor y poder.
Nuestra fe es en nuestro Señor Jesucristo, a quién le sentimos con fuerzas en nuestros corazones.
c.-) ES CRISTO QUIÉN SALVA NUESTRAS ALMAS.
[11] Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor.
Lucas 2:11
Nuestro Señor Jesucristo es el salvador de nuestras almas y cuando le recibimos como nuestro Señor y Salvador, entonces le permitimos a Él que nazca en nuestros corazones.
Ahora que nuestro Señor Jesucristo vive en nosotros, por medio de la fe. Su vida se reflejará en la nuestra y Él nos ayuda en cada paso que damos para llegar a nuestra morada celestial.
Cristo sin dudas es el salvador de nuestras almas, es Él quién nos da la vida eterna, por medio de Su sacrificio en la cruz del calvario.
2.-) DEFENDAMOS NUESTRA FE SIN CONTIENDAS.
[8] Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.
1 Timoteo 2:8
Este verso de la Escritura nos muestra como nuestro Dios desea que seamos pacificadores, que donde estemos traigamos paz y que no haya ni ira, ni contiendas.
Sin embargo, en la primera parte de este verso nos deja entrever que nuestro Dios quiere que estemos en constante oración y atentos a presentar defensa por nuestra fe.
En la oración hay una acción de lucha espiritual contra nuestro enemigo Satanás y cuando nos presentamos delante de nuestro Dios con alguna petición, entonces la contienda en esos momentos ya no es una lucha carnal, sino se transforma abiertamente en una contienda espiritual.
Dicho esto, nos daremos cuenta que el Señor no quiere luchas carnales, sino que nos mantengamos con la confianza puesta en Él y sólo en Él para confrontar al enemigo en forma espiritual.
a.-) AYUDANDO AL DÉBIL EN LA FE;
[1] Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.
Romanos 14:1
No debemos contender con el mundo en forma carnal, más bien debemos procurar ser pacificadores.
Mucho menos debemos contender con los hermanos en la fe y, si alguien viene con palabras deshonestas intentando contender con nosotros sobre algún tema o Palabra de la Escritura, no debemos entrar en discusiones que no nos llevarán a ningún lado.
En lugar de eso, debemos ser ejemplos de la Palabra, para que, aunque no crean en ella por la letra, crean en ella por nuestro buen testimonio.
b.-) CON EL MUNDO;
[14] Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Hebreos 12:14
Debemos ser considerados como pacificadores, buscando la paz con todos, por lo tanto no debemos ser contenciosos, sino traer paz donde quiera que vayamos.
Nuestro Dios así lo quiere, para que andemos en paz con todos; en este sentido nuestro Señor Jesucristo llamó bienaventurados a los pacificadores y como pacificadores seremos llamados hijos de Dios.
Nuestro Dios es amor, es luz y nosotros, Sus hijos, debemos reflejar ese amor, esa paz y esa felicidad que Él nos da y transmitirla al mundo que nos rodea
3.-) DEFENDAMOS NUESTRA FE CONTRA EL ENEMIGO;
[14] Cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.
Santiago 4:7
Nuestro Dios nos invita a resistir al diablo, porque lo que es de Dios es en contra del enemigo y lo que es del diablo es en contra del Señor. Por esa razón todos nosotros debemos tener claridad en nuestras decisiones y acciones; o somos de nuestro Dios o estamos alejados y en contra de Él.
Pero cuando aceptamos a nuestro Señor Jesucristo en nuestras vidas, pasamos a ser parte del glorioso ejército de nuestro Dios y como parte de ese gran ejército debemos estar preparados para luchar la buena batalla de la fe.
a.-) SATANÁS, EL ENEMIGO DE NUESTRAS ALMAS;
[8] Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;
1 Pedro 5:8
La Escritura nos muestra claramente que Satanás es nuestro principal enemigo y que él anda como león rugiente, buscando cómo poder devorarnos, para que dejemos de seguir a Cristo.
Por esa razón, el Señor quiere que estemos atentos y velemos en todo tiempo para no descuidar nuestra salvación y ser devorados por este cruel enemigo.
b.-) ¿QUIÉN NOS ACECHA?
[20] Y acechándole enviaron espías que se simulasen justos, a fin de sorprenderle en alguna palabra, para entregarle al poder y autoridad del gobernador.
Lucas 20:20
Nuestro enemigo el diablo, como estrategia, siempre enviará sus huestes o demonios para entorpecer nuestro camino. Él quiere atraparnos en alguna falta en contra de nuestra fe, tal vez en una palabra deshonesta o en alguna mentira o quizás en una acción pecaminosa y sin duda que Satanás usará esto para avergonzarnos y tratar de desviarnos de nuestra fe. Pero debemos estar atentos a su malévola jugada y refugiarnos en nuestro Dios.
4.-) LA VICTORIA EN NUESTRO DIOS;
[10] Tú, el que da victoria a los reyes, El que rescata de maligna espada a David su siervo.
Salmos 144:10
Tenemos nuestra confianza en nuestro Dios y en Él debemos refugiarnos para enfrentar nuestras batallas espirituales, incluso antes de empezar a luchar con el enemigo, con el Señor de nuestro lado tenemos la seguridad de que obtendremos la victoria.
Por lo tanto, lo que debiesemos entender, mis hermanos, es que si ponemos nuestra confianza en nuestro Dios, nadie podrá hacernos frente. Claro, sí, que debemos luchar y esforzarnos, porque el Señor quiere que seamos valientes, pero principalmente que confiemos en Él.
a.-) SOMOS MÁS QUE VENCEDORES;
[37] Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Romanos 8:37
Su Palabra nos dice claramente que debemos ser más que vencedores. Porque nuestro Dios se manifiesta en nuestras debilidades.
En eso que el enemigo piensa que será nuestra caída, es lo que nuestro Dios usa para avergonzarlo;
¡¡¡NO HAY DERROTA, PORQUE EN JESUCRISTO SOMOS MÁS QUE VENCEDORES!!!
b.-) NADA NOS SEPARARÁ DEL AMOR DE DIOS;
[39] Ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
Romanos 8:39
Su Palabra nos dice que nada podrá apartarnos de nuestro amado Dios.
Nada podrá apartarnos de Su amor que es eterno. Por lo tanto, permanezcamos confiadamente dentro de ese amor y no podremos escapar de Él, pues nuestro Señor todo lo llena.
c.-) PELIEMOS LA BUENA BATALLA DE LA FE;
[12] Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos.
1 Timoteo 6:12
Como dice Su Palabra, debemos pelear esta buena batalla como es debido.
No con contiendas con los hombres, más bien preparate a luchar las batallas espirituales, pues este enfrentamiento debemos ganarlo en el reino espiritual.
Debemos pelear esta batalla con las armas que nuestro Dios nos proporciona, para ello debemos tener en claro que no tenemos lucha contra sangre y carne, como dice Su Palabra en Efesios 6:12, por lo tanto, mis queridos hermanos, nuestro enfrentamiento no es contra el hombre, ni contra las armas carnales, sino que debemos luchar contra armas espirituales y contra las huestes de maldad que Satanás ha dispuesto para derrotarnos.
Nuestro Dios quiere que nos esforcémos y seamos valientes para defender nuestra fe en Cristo Jesús, por lo tanto, mis queridos hermanos, peliemos la buena batalla en todo momento y animemonos a presentar defensa de nuestra fe, de todo ataque del enemigo, exaltando a nuestro Señor Jesucristo por siempre.
𝑸𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝑫𝒊𝒐𝒔 𝒂𝒏̃𝒂𝒅𝒂 𝒃𝒆𝒏𝒅𝒊𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒂́ 𝒓𝒆𝒇𝒍𝒆𝒙𝒊𝒐́𝒏
Que Dios te cuide y bendiga junto a tus seres queridos y anuncia al mundo que nuestro Señor Jesucristo vive y espera con sus manos amorosas por el que quiera conocerle.DEFENDAMOS NUESTRA.
FE EN CRISTO JESÚS


🌞Oración de la Mañana 🌞
Amado Dios, en este nuevo amanecer, me presento ante Ti con un corazón lleno de gratitud. Gracias por la vida y por la oportunidad de vivir un nuevo día. Gracias por todas las bendiciones que diariamente derramas sobre mí, por tu amor infinito y tu gracia inagotable. Te doy gracias, Señor, por cada momento, por cada sonrisa, por cada pequeño detalle que hace que mi vida sea más rica y plena. Gracias por las personas que pones en mi camino, por mi familia y amigos que me apoyan y me aman.
.
En esta mañana, te pido fuerzas para continuar adelante, para enfrentar cada reto que se presente con determinación y esperanza. Dame la salud necesaria para no desfallecer, para que pueda vivir cada día con energía y vitalidad. Concédeme la valentía para enfrentar lo que venga, para no temer a lo desconocido y para confiar plenamente en tu plan. Ayúdame a tener la seguridad de que siempre estás conmigo, abriendo caminos donde parece no haber ninguno y dándome luz en medio de la oscuridad de los problemas.
.
Que pueda sentir tu presencia en cada paso que doy, en cada decisión que tomo, y que tu paz me acompañe en todo momento. Guíame con tu sabiduría y permíteme ver más allá de las dificultades, encontrando soluciones y oportunidades donde otros solo ven obstáculos. Que tu Espíritu Santo me inspire y me fortalezca, recordándome siempre que en Ti está mi esperanza y mi refugio. Gracias, Dios, por tu amor incondicional y por escuchar mis oraciones. Te entrego este día, confiando en que tu mano me guiará y me sostendrá en todo momento. En Nombre de Jesús. Amén 🙏
.
📖En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan.
Hebreos 11:6🕊
.
✠
📃Envía a quien quieres bendecir con la #oracióndelamañana 📃Por Ma. Guanajuato González Castañales.








