Por Inma Gómez

“Lo INTENTO y lo intento…pero NO lo consigo”.
Una de la FRUSTRACIONES más profundas del ser humano es la de, a pesar de intentarlo una y otra vez, NO CONSEGUIR lo que se PROPONE.
Diseñamos PLANES, rutinas de trabajo, los medios para conseguir los objetivos…, pero la mayoría de las veces DISOCIAMOS la acción de nuestro pensamiento y emoción.
En realidad, a pesar de empeñarnos, NO CREEMOS ni en nuestro proyecto ni en nuestra CAPACIDAD.
Nuestros pensamientos, creencias, valores y emociones VAN en una dirección y nuestras ACCIONES en sentido contrario.
Así es IMPOSIBLE lograr el OBJETIVO.
De qué sirve “MATARTE” a trabajar si…
1️⃣El 70 % de tu diálogo INTERNO es en sentido negativo y lo mantienes unas 14 horas al día, como dicen los expertos…
2️⃣TE CENTRAS o te quedas MÁS con tus errores durante el PROCESO que con TUS aciertos, magnificándolos y MACHACÁNDOTE por ellos.
3️⃣RUMIAS y rumias constantemente con PENSAMIENTOS catastrofistas como “no sé para qué hago esto…”, “no voy a conseguirlo”…
4️⃣DAS por ciertas TUS CREENCIAS sin replantearte si lo SON realmente.
Crees en algo porque sí… “soy un inepto”, “No sirvo para emprender”, “soy malo para el dinero”…generando IMPACTO en tu REALIDAD y en el significado que le DAS.
5️⃣Las EMOCIONES que experimentas, mientras pones en marcha la ACCIÓN te desasosiegan…son negativas,
6️⃣SIENTES lo que haces como una CARGA. Más como un deber que como placer..
Si TRABAJAS sin pasión y sin ilusión.
7️⃣TUS SENTIMIENTOS son de desesperanza y hastío.
8️⃣TUS VALORES andan muy lejos de tu propósito… o no hay LINEALIDAD ni alineación…?
De nada. Sé de lo que hablo. Me esforzaba, pero no VEÍA resultados.
Hasta que entendí que TODO propósito empieza y termina en MI.
No es solo ACCIÓN, que es esencial, es un COMBO que no se toca, pero se siente: ACTITUD, pensamiento, sentimiento y EMOCIÓN.
Si no apunta TODO en la misma dirección… ABANDONA. Estás perdiendo el tiempo.
Qué opinas? Te leo!


LA MADRE, DE LA MADRE
Mientras los ojos del mundo están en el bebé que acaba de nacer, la madre de la madre ve a su hija, recién convertida en madre.
El papel de abuela puede esperar, porque es su niña quien llora, con sus pechos doloridos.
La madre de la madre frota ropa manchada de caca, barre el piso, asegura un almuerzo. Compra camisones con botón lava sábanas sucias de leche y sangre. Sabe lo duro que es volverse madre.
En el silencio de la madrugada, piensa en la hija, despierta. ¿Cuántas veces ha sido? ¿Aguantará la mañana con una sonrisa? y le lleva algo caliente y su postre favorito y puede ver todo lo que le pasa a su hija, a la nueva madre, mejor y antes que nadie.
La madre de mamá ayuda a su hija a volar. Cuida todo lo que está en sus manos para que se reconstruya, descubre su nueva identidad.
AHORA ES MADRE, PERO SIEMPRE SERÁ SU HIJA ❤”
Créditos al autor.










