¿Qué es amar a Dios?

CONTENIDO CRISTIANO

Por Mariant Peña N.

En estos últimos días me he dado cuenta que *Amar a Dios* va más allá de un sentir ó una emoción, va más allá de lo que puedo explicar en el entendimiento humano.

*Amar a Dios* significa renunciar a mis propios deseos por los de Él.

*Amar a Dios* es negarme a mi mismo.

*Amar a Dios* es entregar todo de mi.

*Amar a Dios* es aprender a perdonar a otros.

*Amar a Dios* es no tener envidia, ni jactancia, ni andar en chismes, ni hipocresía.

*Amar a Dios* es aprender a no depender de mi mismo sino de Él.

*Amar a Dios* es reconocer que estoy equivocado y no tengo la razón todo el tiempo, que debo ceder y dejarme moldear por Él.

*Amar a Dios* es obediencia.

*Amar a Dios* es humildad.

*Amar a Dios* es misericordia.

*Amar a Dios* es compasión.

*Amar a Dios* es paz.

*Amar a Dios* es discernir todo junto con Él.

*Amar a Dios* es honestidad.

*Amar a Dios* es no buscar mi propio beneficio sino el de los demás, es estimar a otros más que a mi mismo.

*Amar a Dios* es fidelidad. *Amar a Dios* es sufrir y creer independientemente de las circunstancias. *Amar a Dios* es tener fe de lo que no se ve como si fuese. *Amar a Dios* es accionar por un mover del Espíritu Santo.

( Juan 3:8). *Amar a Dios* es aprender a soportarlo todo,con la plena confianza de que todo obra para bien.

*Amar a Dios* es confiar, hechando la duda fuera.

*Amar a Dios* es más que un sentimiento; amar a Dios es una decisión. Una acción absoluta diciendo, que pase lo pase, voy a permanecer amando sobre todo adversidad, circunstancia o problema, voy a permanecer confiando, creyendo y viviendo por la fe que Jesús mismo nos ha entregado a través de su amor y gracia.

*Amar a Dios* no es un amor que el mundo ofrece sino un amor que nunca deja de ser, un amor genuino, un amor sin fecha de vencimiento. Un amor puro y veraz. Un amor como el Gran Yo Soy, porque Él es el significado del amor.

¿Quieres saber que es el amor de verdad?

Solo piensa en todo lo que Dios ha hecho por tí en nombre de ese amor que Él tiene por ti, un amor que significó sacrificios. Un amor que lo lleva accionar por ti, por mi y por todos.

Este es el amor que hay en nuestros corazones debe ser, un amor incondicional. Un amor que es obediente al Creador de ello. No existe un Dios más grande, poderoso, omnipotente, un Dios que ha hecho todo para que te des cuenta de cuan valioso eres para Él y que su amor por ti no tiene fin…

Concluyendo, creo que el amar a Dios es una decisión que tomamos, porque Él en su inmensa sabiduría ha puesto en nosotros por medio de su Santo Espíritu, la decisión de caminar juntamente con Jesús, todos los días de nuestras vidas.

*Amar a Dios* nos llevará a poder amar a los demás tal como Él nos ama a nosotros.

Un amor entrelazado entre la fe, esperanza y obediencia.

1Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe. 2Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.

1 Corintios 13:1-2

Noticias del Reino

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Deléitate asimismo en Dios,

Y él te concederá las peticiones de tu corazón.

Salmo 37:4

Mariant Peña N.

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