Este mes en que festejamos el día de las madres quiero hacer una reflexión de lo que ser mamá implica.
Primeramente, quiero felicitar a cada mujer por la decisión que tomó de ser mamá, de tener y cuidar a tus hijos.
Es una decisión que implica valentía porque si es un privilegio que Dios nos otorgó a las mujeres de llevar vida dentro de nosotras, pero implica muchísima responsabilidad, trabajo, preocupación, esfuerzo, dedicación y muchas cosas más.
Leí en un artículo una frase que me impactó: es de la UNICEF y dice:
“La mamá es todo lo que somos y llegamos a ser”
¡Tremenda declaración, pero también gran responsabilidad!
- La mamá es la persona que está más cerca para acompañarnos a través de la trayectoria de la vida
- la mamá es la que nos cuenta de cómo es la vida
- la que nos va armando y organizando los recuerdos que tenemos de la infancia
- la que forma
- la que instruye
- la que cuida
- la que protege
Para esta tarea de tanta responsabilidad se necesita Sabiduría.
La mujer sabia edifica su hogar, pero la necia con sus propias manos la destruye.
Proverbios 14:1 NTV
La palabra de Dios nos habla acerca de ser mujeres sabias, necesitamos sabiduría para esa tarea de tanta responsabilidad que es ser mamá.
Una mujer sabia es la mujer que busca a Dios y tiene a Dios en el centro de su hogar. La mujer sabia sabe lo que a Dios le agrada y lo que no.
Definición:
“Sabiduría es el arte de alcanzar el éxito de formar el plan correcto para llegar a los resultados deseados”
Los resultados deseados de las mamás en su mayoría sería ver a sus hijos, exitosos, prósperos en cada área de su vida.
La palabra de Dios nos dice:
El principio de la sabiduría es el temor del Señor. Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.
Proverbios 1:7 RV
Para esto es necesario renovar nuestra mente, ser guiados por la Palabra de Dios, necesitamos empezar a pensar como Dios piensa.
No imiten las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, buena agradable y perfecta
Romanos 12:2 NTV
La tarea de ser mamá tiene que ver con ser mujeres sabias que edifican que instruyen, que corrigen, qué forman.
Es importante que empecemos a pensar de manera diferente que busquemos esa sabiduría en la instrucción en la Palabra de Dios porque ahí está la verdadera sabiduría y actuemos.
¿Necesitas esa sabiduría?
Si necesitan sabiduría pídansela a nuestro generoso Dios y en se la dará; no los reprenderá por pedirla.
Santiago 1:5 NTV
Mamás para edificar correctamente, instruir con precisión, guiar a nuestros hijos es necesario la sabiduría de Dios, pero también la inteligencia.
Inteligencia y sabiduría no son lo mismo.
“La inteligencia es la instrumentación de la sabiduría”
Podemos tener sabiduría y actuar sin inteligencia.
¿Qué hace la diferencia?
Poner en práctica lo que sabemos, sabiendo lo que Dios dice en su palabra, cuál es su voluntad, lo pongo en práctica y lo hago. (ser hacedores)
Hay muchas personas que tienen sabiduría, pero sin embargo en su vida diaria no son inteligentes o sea que son sabias en conocimiento, pero no toman decisiones inteligentes.
Quizá tienen mucho conocimiento, sabiduría de la Palabra de Dios, pero no lo ponen en práctica, y los lleva a no tomar decisiones o elecciones inteligentes.
Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; No te olvides ni te apartes de las razones de mi boca; No la dejes, y ella te guardará, ámala y te conservará.
Proverbios 4:5-6 RV


Amado Dios, en esta mañana me despierto con la intención de expresarte mi alegría, gratitud y admiración por tu amor incondicional y tu infinita bondad.
Gracias Señor por todas las cosas buenas que Tú haces en mi vida y en la vida de mi familia, por amarnos, por bendecirnos y por concedernos la oportunidad de experimentar tu presencia y recibir tus bendiciones cada día.
Gracias Padre por este nuevo amanecer que se alza ante mí.
Gracias por la oportunidad de despertar y disfrutar de la belleza de tu creación.
Gracias por cada rayo de sol que ilumina mi camino, por el fresco aire de la mañana y por cada latido de mi corazón que es un regalo de vida.
Hoy, te pido, Dios, que me acompañes en cada paso que dé, que seas Tú el faro que me guía en medio de las tormentas y el refugio que me protege de cualquier adversidad.
Me encomiendo a Ti en este nuevo día y te ruego que me concedas sabiduría y discernimiento para tomar decisiones acertadas y bondad en cada uno de mis actos.
Padre Celestial, te pido que en este día me ayudes a ser más como Tú, a ser paciente y comprensivo con aquellos que me rodean.
Permíteme ser un instrumento de tu amor y de tu bondad hacia los demás, para que pueda hacer una diferencia positiva en sus vidas.
En nombre de Jesús, Amén.
Por Ma. Guanajuato González








